Cultiva tu propia marihuana

Madrid acogió el pasado mes de mayo la vigésimo tercera Marcha Mundial de la Marihuana para reivindicar una regulación integral y social de su consumo. Este acto se lleva realizando desde el año 1999 en cientos de ciudades de todo el mundo cada primer fin de semana de mayo. Una celebración que engloba la cultura del cannabis como un estilo de vida personal. España es el cuarto consumidor de cannabis de Europa, ya que el 17,1% de los adultos lo consumen, según los últimos datos publicados por el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías. Además, el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) muestra que la mitad de los españoles (el 47,2%) estaría a favor de legalizar su venta, mientras que el 84% aprobaría su uso médico.

La regulación legal del cannabis es diferente en cada país. En España está permitido el consumo propio y la tenencia de marihuana, pero sólo en casa. Según el Tribunal Supremo, la posesión legal para el consumo personal de cannabis es de 100 gramos. De esta forma, el Código Penal señala que no es delito poseer esa cantidad, siempre que sea para cultivo, posesión o consumo propio. Fumar marihuana tiene beneficios para la salud que están científicamente demostrados. La ‘maría’ aporta sustancias químicas conocidas como cannabinoides que actúan sobre el sistema endocannabinoide de nuestro cuerpo. Este sistema regulado por distintos receptores está involucrado en una multitud de procesos fisiológicos. Los principales cannabinoides del cannabis son el THC y el CBD. El canabidiol o CBD aumenta los niveles del neurotransmisor endógeno conocido como 2-AG, que se ocupa de la regulación del sistema inmunitario y la regulación del dolor.

Pasos para el cultivo de marihuana

Cultivar tu propia marihuana en casa es una forma asequible de disfrutar de todos los beneficios para la salud de su consumo. El primer paso es escoger las semillas de cannabis. Por suerte, hoy en día es posible comprar semillas de marihuana online, aunque nos podemos encontrar con más de 3.000 variedades de semillas de cannabis de calidad disponibles. Más allá de tus preferencias personales, la elección siempre dependerá del espacio disponible para cultivar, ya que no es lo mismo un amplio jardín que un pequeño armario interior.

Hay que tener en cuenta que el cannabis exige una serie de requisitos indispensables para desarrollarse a pleno potencial. Este cultivo requiere más de 12 horas de luz al día, aire fresco en movimiento, agua, una temperatura controlada para evitar que se congelo o hierva, fertilizantes y un control de la humedad. En cualquier caso, puedes encontrar cualquier tipo de semilla de calidad que se adapte a tus necesidades y tus circunstancias para cultivar en seedsman.com. Con unas condiciones adecuadas, las semillas comenzarán su ciclo de vida. Sin embargo, el proceso de germinación, que es fundamental para que las semillas puedan abrirse y se transformen finalmente en plantas de marihuana, no se llevará a cabo si no se cumplen tres condiciones: agua, una buena ubicación y temperatura adecuada.

La planta de marihuana tiene tres fases de desarrollo a partir de una semilla: germinación, crecimiento y floración. Uno de los errores más habituales es subestimar el proceso de crecimiento vegetativo, ya que puede parecer el menos importante. Sin embargo, si descuidas esta fase del cultivo repercutirá en el resto del proceso de desarrollo del cannabis. Esta fase de crecimiento se prolonga más en el cultivo exterior, debido a que dependemos de la luz natural, por lo que crecerá de una forma más rápida si empezamos a plantar marihuana en España durante la primavera y hacia el verano. De esta forma, se recomienda aplicar un fotoperiodo de 18 horas de luz y 6 horas de oscuridad al día para el cultivo interior.

La floración es la última fase en el cultivo de marihuana. Durante las semanas que dura este proceso, la planta de cannabis desarrolla sus cogollos, aunque también requiere de otro tipo de cuidados. En un primer momento se apreciará un cambio importante en el patrón de crecimiento, ya que adoptará nuevas estructuras características diferentes a la simetría habitual de las fases anteriores. Posteriormente se empezarán a formar las flores y surgirán los primeros cálices, que es la primera parte de la flor que nace cuando una planta de marihuana entra en la floración. Además, también se desarrollarán bolitas cubiertas de pistilos. Todo ello con una continua producción de resina. El cultivo de marihuana en casa termina con la cosecha, el secado y el almacenaje de los cogollos curados.